Antecedentes

Existe evidencia fósil de que las cucarachas han estado en la tierra, por lo menos, durante 350 millones de años, así que no hay duda de su alta capacidad adaptativa y reproductiva. Por esta razón, se han convertido en una de las plagas más difíciles de controlar.

Reproducción

Las cucarachas tienen incrementos poblacionales explosivos: Por cada cucaracha que vemos hay 25 que no vemos y sus ninfas son tan pequeñas que decenas de ellas caben en una caja de fósforos. Estas características y su resistencia a ciertas categorías de insecticidas las hacen difíciles de eliminar. Sin embargo, se han desarrollado insecticidas de última generación que les permiten a los profesionales lograr un control efectivo de las mismas. ¿Cuántas veces no te has topado con estos insectos en algún rincón de tu hogar o negocio? Las cucarachas se ubican entre las plagas más comunes. Suelen habitar lugares húmedos y se les puede encontrar en casi cualquier hábitat o clima. Prefieren mantenerse activas durante la noche, pero también pueden verse durante el día, principalmente cuando la población presente es alta. Las cucarachas lo aprovechan todo, pues se alimentan de una variedad de materiales, desde materia orgánica hasta cucarachas muertas, razón por la cual se les consideran insectos caníbales.

Por suerte, sus mandíbulas no son lo suficientemente fuertes como para causar una mordida a un humano; aun así, pueden llegar a explorar todo su entorno e incluso tener contacto con las personas mientras duermen. De solo pensarlo, ¿no te causa repulsión? Son aparentemente inofensivas, pero su presencia, a menudo, trae consigo graves implicaciones en la salud.

Las cucarachas tienden a refugiarse en lugares sucios, como las alcantarillas, depósitos de basura y zonas insalubres de cocinas, baños o almacenes.

Consecuencias

En sus patas y cuerpos se desarrollan organismos causantes de enfermedades como la gastroenteritis, E. coli, salmonela, disentería y cólera. Sentir náuseas, calambres abdominales, vómitos o diarrea son apenas algunas de las consecuencias menores de haber entrado en contacto con ellas. Cuando se trasladan, ¿a dónde crees que va a parar toda esa suciedad, gérmenes y bacterias? Es muy probable que a tu superficie de cocina, alimentos, platos y utensilios. Aunado a ello, producen secreciones olorosas y materia fecal que pueden resultar perjudiciales para las personas sensibles o alérgicas. Un punto a favor es que este tipo de pistas ayudan a detectarlas para poner en marcha un buen programa de manejo de plagas. Los cientos de grietas y hendiduras pueden convertirse en lugares seguros para las cucarachas. Sin dudas, ellas están a salvo, ¿tu casa y negocio lo están? Permítenos proteger lo más importante. En SIFSA ponemos a tu alcance los mejores programas contra cucarachas.